miércoles, 22 de septiembre de 2010

Los correbous

Debe ser que yo soy tonto, que diría el Luisma, pero no entiendo y por más que me lo expliquen no entenderé que el Parlamento catalán, después de prohibir las corridas de toros por ser un espectáculo que denigra a los animales, ahora pretenda “blindar2 a los “correbous”.
No lo entiendo y no hace falta que nadie intente explicármelo porque seguiré sin comprenderlo, porque si violento, maltrato y agresión es uno, ni un ápice menos lo es el otro espectáculo, por muy tradicional en los pueblos que ahora nos lo quieran vender.
Debe ser que la incongruencia es libre, porque prefiero pensar eso que dar la razón a los que me decían que les importaba tres carajos a la violencia, el maltrato y la agresión, y que lo único que les importaba era dar el coñazo a unos pocos.

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