Verdades a medias o mentirijillas

Estaba hoy leyendo en algún periódico un artículo sobre un tema específico, que importa poco el tema y el periódico, y pensé que pareciera que todo aquello que sale en un medio de comunicación es verdad absoluta, una verdad que va a misa que dirían algunos, cuando todos sabemos que los medios de comunicación están completamente infectados de verdades a medias, que he oído que casi siempre es la mayor de las mentiras, de verdades interesadas, es decir una mentira que a fuerza de ser repetida llega a convertirse en verdad, o los mitos que después de haber pasado los días y pasar de boca en boca terminan convirtiendo algo que nunca sucedió en realidad, aunque que todos tienen algún pariente, amigo, conocido que dicen haber visto, quizás el más conocido sea el de la mermelada o paté, la niña, el perro, el cantante famoso y el programa en directo de televisión. ¿Se acuerdan?.

Seguro que todos han escuchado algún primo, hermano, cuñado o cuñado de un primo hermano que vio ese programa e incluso pasados los años no obstante existe quien te insiste que ha visto la escena de alguna forma, ahora como no podía de ser de otra forma en el “Youtuve”, que tiene la facultad de tener en sus entrañas supuestamente todo aquello que todos saben que nunca vas a encontrar por más que pierdas las pestañas buscando.

Claro que existe aún una mentira peor, una mentira mucho más horrible que todas las que he contado anteriormente, que es la mentira oculta, es decir esa mentira o esa verdad que algunos conocen pero que mantienen silenciada por algún motivo, algún chantaje, alguna extorsión o simplemente porque interesan a algunas personas. Pero he aquí que un día que esos intereses o esas extorsiones dejan de funcionar y a la sazón esas mentiras o esas verdades aparecen de forma ruin por todos los medios de comunicación, olvidando que los que las publican son los mismos que las mantenían en secreto de forma de oculta durante años.

No sé porque estoy escribiendo yo de esto, tal vez no sea por nada determinado, sino porque me apetece contarlo, porque no siempre todo hay que hacerlo por algo concreto, aunque a lo peor si usted se para a pensar un ratito conoce o se acuerda un montón de noticias que deberían estar en los titulares con letras grandes y sin embargo se encuentran empolvadas en los cajones. ¿A que si?.