Todas las noches, antes de acostarme
me hago la propuesta firme, e incluso la apruebo por mayoría de que al día
siguiente no escribiré ni una palabra de política. Después de hacerla me quedo
tan tranquilo y duermo a pierna suelta.
Llega la mañana, empiezo a leer
los periódicos, y cuando me doy cuenta ya tengo escrita alguna entrada que se
contradice con mi proposición de la noche anterior. ¡No hay forma!. Y he de
reconocer que el tema catalán me tiene especialmente enervado, no por la
independencia o no independencia, que he de aclarar directamente que me importa
tres carajos, sino por la cantidad de mentiras, de embusteros, de hipócritas,
de aprovechados que está llegando a la causa, creyendo que los demás ciudadanos
somos simplemente gilipollas.
Decidme que es para callarse el
titular que me encuentro esta mañana en un periódico: El Barcelona no considera
ya a España como su país ni en términos geográficos. (La verdad es que pone Barsa,
pero como en mi ordenador no encuentro esa letra es por lo que he puesto
Barcelona).
Se puede ser más gilipollas, y no
lo digo porque no se consideren españoles, que cada uno es muy libre de
considerarse lo que le dé la gana, sino porque la realidad les hace quedar en
ridículo cuando dicen esas cosas, que yo no sé quién será el gililipollas que
las suelta.
¿No se han enterado esa gente que sin España son
simplemente una mierda? ¿Qué sería el Barcelona jugando con el Lleida, el Sabadell,
el Girona, el Badalona o el Cornellá?. ¿Qué sería del Barcelona sin poder
participar en ninguna de los torneos europeos?. ¿Se lo imaginan?. El primero
que supongo saldría en estampida ante tan maravilloso panorama sería Leo Messi,
que quiero imaginar que correría al grito de vaya tropa.
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