martes, 16 de febrero de 2010

De economía

Me quedo pasmado, totalmente de piedra, porque ahora resulta que son los llamados brokers, que en español de calle no es otra cosa que intermediario; banqueros y otros vendedores de humo que han hecho posible que estemos metidos en esta crisis mundial, a los que poco menos que debemos pedir perdón casi de rodillas y convencerlos que somos buenos de la muerte y que estamos haciendo la tarea.
Me van a perdonar que sea un poco ordinario, y si no quieren perdonarme tampoco me perdonan, que me da exactamente igual; pero como diría el genial Fernando Fernán Gómez: ¡A la mierda!.
Debe ser que yo en estos temas soy bastante radical y pienso que los gobiernos, todos los gobiernos desgraciadamente, son bastante tolerantes, flexibles, blandos e incluso muy sumisos con esos señores que tienen como oficio, dedicación y afición fastidiar a los ciudadanos, hacerles pasar la vida mucho peor y encima quedarse con sus dineros, mientras ellos disfrutan o cambian de nombre empresas y sociedades, quedando además como unos fantásticos gestores, con unos asesores igualmente geniales, maravillosos y fantásticos.
Hace unos días leí en uno de esos libros de gran éxito que todos llevamos en las manos una frase que apunté y era que las corbatas las llevan "los modernos guerreros de las oficinas con la esperanza de intimidar a sus enemigos en las batallas diarias del salón de juntas".
Me parece una frase genial, porque identifica perfectamente a una saga que van uniformados de respetables desde que se levantan hasta que se acuestan, porque creen que así pueden mantener a ralla a sus contrincantes, sin darse cuenta que los tiempos están cambiando y yo ya he visto a mas de uno con su corbata horrorosa repartiendo publicidad de una inmobiliaria por el mercado de abasto, y no es que tenga nada malo repartir publicidad, que me parece un trabajo muy decente.
- Que pesaito te pones con la corbata. Si no te la quieres poner no te la pongas, pero deja que cada cual haga lo que le de la gana.
No empecemos ya que no tengo hoy el horno para bollos, ni la peineta pa flores y hoy estoy intentando hablar de alta economía mundial, toma del frasco Carrasco, y para un día que me atrevo a decir estas cosas que estoy convencido que ningún broker ni ningún presidente de gobierno va a leer, pero bueno yo las suelto de todas formas porque me quedo muy desahogaito. Además lo que más me gusta es que nadie se va a atrever a contestarme, porque como en este tema todos están tan inseguros y nadie sabe por dónde va a ir la economía, puedo permitirme el lujo de explicar lo que me dé la gana.
He de reconocer que si servidor fuese presidente de gobierno, lagarto, lagarto, no tendría tantas contemplaciones con toda esta gente y a lo mejor mas de tres terminaba donde si debían estar, porque quedarse con dinero de otro es tanto robar como ir a un banco con una pistola de plástico para que te den la recaudación del día, y unos están en la cárcel y a los otros debemos pedirles perdón, pero bueno que se le va a hacer, la sociedad está así montada y me parece que va a ser un tanto complicado cambiarla aunque sólo sea una mijita
¿Dónde coño estaban los gurús de la economía mundial tan entendidos que desde hace dos años no han acertado ni una?. Esos gurus que hoy te dicen blanco, mañana negro o pasado gris, depende de cómo amanezca y dependiendo de hacia donde soplen los billetes verdes, de dólares.
Me parece que voy a tener que terminar, que me estoy perdiendo un poco y al final terminaré escribiendo demasiadas tonterías y eso no es bueno de ninguna forma, que últimamente todos me decían que estaba muy centradito y yo hasta había llegado a creérmelo y decía que eso serían los años y las canas.

Esté artículo fue publicado en el periódico Sanlúcar Información el pasado sábado día 13 de febrero de 2010

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